Trasladamos el comunicado de agradecimiento que nos hacen llegar Octavio Alberola y Daniel Pinós del Grupo de apoyo a los libertarios y a los sindicalistas independientes de Cuba.
"La CGT ha aportado su ayuda a la reconstrucción del movimiento libertario cubano, hoy estamos viviendo una etapa importante con el nacimiento de l'ABRA: Centro Social y Biblioteca Libertaria. Estamos felices de haceros descubrir el comunicado de los compas habaneros.
_______________________________
Trasladamos el comunicado de agradecimiento que nos hacen llegar Octavio Alberola y Daniel Pinós del Grupo de apoyo a los libertarios y a los sindicalistas independientes de Cuba.
«La CGT ha aportado su ayuda a la reconstrucción del movimiento libertario cubano, hoy estamos viviendo una etapa importante con el nacimiento de l’ABRA: Centro Social y Biblioteca Libertaria. Estamos felices de haceros descubrir el comunicado de los compas habaneros.
_______________________________
Trasladamos el comunicado de agradecimiento que nos hacen llegar Octavio Alberola y Daniel Pinós del Grupo de apoyo a los libertarios y a los sindicalistas independientes de Cuba.
«La CGT ha aportado su ayuda a la reconstrucción del movimiento libertario cubano, hoy estamos viviendo una etapa importante con el nacimiento de l’ABRA: Centro Social y Biblioteca Libertaria. Estamos felices de haceros descubrir el comunicado de los compas habaneros.
_______________________________
Desde Cuba iniciamos este 5 de mayo de 2018 una nueva etapa en el proceso autoemancipatorio de un grupo de cubanos y cubanas, con la apertura de ABRA: Centro Social y Biblioteca Libertaria.
Este empeño del Taller Libertario Alfredo López (iniciativa anarquista, anti-autoritaria y anticapitalista surgida en 2012, que forma parte de la Federación Anarquista del Caribe y Centroamérica), con el efectivo y vital involucramiento de colectivos afines como Observatorio Crítico Cubano, Guardabosques, así como algunas otras energías individuales; intenta construir un espacio autónomo y sostenible en la Cuba de hoy.
Un espacio para promover experiencias y prácticas independientes de cualquier gobierno foráneo o nacional, o instituciones que los representen, centrado en las capacidades de quienes se involucren. Desde ABRA se insistirá en una práctica que prefigure el tipo de sociabilidad que soñamos, y en un tipo de relacionamiento amigable con el medioambiente, que se traduce en un mínimo de consumo con un máximo de soluciones propias no contaminantes.
Este nuevo empeño es esencialmente anticapitalista, pues el capitalismo promueve un tipo de relaciones entre las personas basadas en el utilitarismo, la supremacía, la competencia, la ganancia, todo lo cual no conduce a la sociabilidad que aspiramos. Lo anterior es sostenido por los Estados, las empresas y corporaciones que dominan y depredan al mundo y a nuestro país. Por ello el Centro Social se coloca en las antípodas de todo lo anterior.
Por otra parte, no es posible la emancipación sin formar parte de las comunidades. Es por ello que ABRA existe de cara a ellas y dentro de ellas, no ajena a las opresiones que sufren, ni a las victorias que logran en su lucha. De igual modo se involucra en las dinámicas de resistencia y creación de otros grupos afines, a quienes les damos cabida en nuestro Centro y nuestros proyectos. ABRA pretende aportar un espacio para todas aquellas sociabilidades, personas y grupos de afinidades que no se limitan al estrecho marco del conflicto gobierno-oposición, se plantean el abordaje directo y por cuenta propia de las diversas cuestiones de la vida cotidiana y la creación en todas las esferas de la realidad.
Este espacio se sitúa activamente en contra de las discriminaciones por motivos de raza, origen étnico, género, sexualidad, orientación sexual, identidad de género, territorio, nivel de instrucción, estatus económico, y cualquier otra en contra de la dignidad de las personas. Asimismo, reconoce la pluralidad de pensamientos (políticos, ideológicos, morales, etc.), sin renunciar nunca a ejercer los nuestros.
ABRA se brinda como lugar de confraternización, en medio de una ciudad mercantilizada y vigilada, y ofrece un espacio para la contra-información local, nacional e internacional, la formación autodidacta, conmemoraciones, celebraciones, encuentros; buscando incentivar la precaria escena contracultural, productiva autónoma, existente en La Habana y la región Cuba.
El Centro Social se constituye como espacio de comunicación social horizontal para dar voz a aquellas experiencias nacionales e internacionales que no son de interés para las agencias hegemónicas, pero que tributan a una perspectiva antiautoritaria y emancipatoria que sí interesa a quienes luchamos en Cuba.
Aquí medios y fines no se contradicen: son la horizonalidad, la libertad de la persona, la participación efectiva a partir del involucramiento directo.