Apenas hace unos días ocupamos las calles con motivo del 8M, reivindicando entre otros motivos el fin de todo tipo de violencia, y hoy, como cada día 25, desde CGT nos encontramos aquí volviendo a denunciar el terrorismo machista que nos asesina:
A Elia, con solo de 17 años de edad, asesinada por arma de fuego por su pareja (según su confesión), el 27 de febrero en El Rubio, Sevilla (Andalucía); a Rosa, de 78 años, asesinada tras 47 puñaladas, el 27 de febrero en Andújar (Jaén, Andalucía); a María del Carmen L., de 39 años, que habiendo interpuesto denuncias por violencia de género, no evitó que fuera asesinada por su exmarido (según reconoció tranquilamente), a cuchilladas en el portal de su casa y delante de su hijo de 6 años, el 3 de marzo en Villanueva de Gállego (Zaragoza, Aragón); a una mujer de 33 años de quien no ha trascendido su nombre, asesinada el 3 de marzo en Alcobendas (Madrid, Comunidad de Madrid); y a Tatiana Coinac, de 44 años, encontrada el 13 de marzo en Oviedo (Asturias).
Y con ellas, 5 mujeres asesinadas por terrorismo machista en este último mes, ya son 19 en lo que va de año, y vamos sumando y sumando, al menos 1.850 desde el 1 de enero de 2003.
Y decimos al menos por qué según su propia definición, el Ministerio de Igualdad considera Víctimas mortales de violencia de género solo a aquellas que estén o hayan estado ligadas por relación de afectividad con el agresor. Con este sistema excluyente, el Gobierno lleva un recuento de 1.194 entre las mismas fechas. Dejando fuera a otras muchas personas que, siendo asesinadas por la misma violencia machista, únicamente han podido ser recogidas y recordadas en caso de aparecer en los medios de comunicación, registro que se ha ido llevando en páginas como feminicidio.net desde el año 2010.
Mientras que la ONU, que dentro de su Agenda 2030 tiene como objetivo eliminar todas las formas de violencia contra todas las mujeres y las niñas en los ámbitos público y privado, considera el Feminicidio como “El asesinato intencionado de una mujer por el hecho de serlo”, incluyendo los siguientes tipos de violencia de género:
- Violencia física: Causar o intentar causar daño a una mujer empleando cualquier tipo de fuerza física contra ella
- Violencia psicológica: Provocar miedo a través de la intimidación, de la amenaza a una persona, a su pareja o sus hijas o hijos. También puede amenazar con destruir sus mascotas y bienes, entre otros.
- Violencia económica: Lograr o intentar conseguir la dependencia financiera de otra persona, manteniendo para ello un control total sobre sus recursos financieros.
- Violencia emocional: Minar la autoestima de una persona a través de críticas constantes, infravalorando sus capacidades, insultándola y sometiéndola, entre otros.
- Violencia sexual: Cualquier acto de naturaleza sexual cometido contra la voluntad de otra persona.
- Asesinatos por honor: Asesinar a un familiar, a menudo una mujer o una niña, alegando que ha traído el deshonor o la vergüenza a la familia.
- Trata de personas: Adquisición y explotación de personas utilizando la fuerza, el fraude, la coacción o el engaño.
- Mutilación genital femenina: Procedimientos destinados a alterar de manera intencionada o causar daños en los órganos genitales femeninos por razones no médicas.
- Matrimonio infantil: Las niñas tienen una probabilidad mayor que los niños de casarse siendo menores de edad y, por tanto, de abandonar la escuela y experimentar otras formas de violencia.
- Violencia en línea o digital: Acto de violencia a través de tecnología contra una mujer por el hecho de serlo.
A pesar de las limitaciones españolas en la consideración de violencia de género, año tras año siguen aumentando las denuncias, alcanzando 1.825.608 de denuncias entre los años 2007 al 2019, según el último Informe anual del observatorio estatal de violencia sobre la mujer 2019.
Desde CGT exigimos medidas eficaces por parte de los organismos gubernamentales y públicos que erradiquen estos asesinatos y agresiones. Volvemos a exigir el cumplimiento íntegro de Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, y la Ley Orgánica 10/2022, de 6 de septiembre, de garantía integral de la libertad sexual, y resto de normativa. Que se desarrollen nuevas medidas de protección, acordes al Convenio de Estambul y a la Agenda 2030, convirtiéndose así de manera real y efectiva en un sistema integral de protección que erradique cualquier forma de violencia, especialmente la violencia machista, presente no solo en el ámbito doméstico, sino en las calles, en los centros de trabajo, en el sistema educativo, etc, sea combatida de manera real y efectiva.
Secretaría de la Mujer
