Tras no haberse alcanzado ningún acuerdo ante el SERCLA durante la jornada de ayer, la huelga indefinida da comienzo a las 0h del día 22 de junio.
El tándem formado por el SAS y CLECE, quiere hacer pagar los platos rotos y enmascarar su mala gestión, al personal de la limpieza de Barbarela, al que con la excusa de un supuesto ahorro energético se les ha anunciado la modificación de sus contratos y turnos de trabajo y una drástica reducción de sus salarios en torno a 260€, a los que habrá que sumar la reducción derivada del decreto de la Junta de Andalucía en un 15% más.
Una vez más, el último eslabón de la cadena es el elegido por la Administración y las empresas interpuestas, en este caso CLECE, para cebarse contra las condiciones laborales y económicas de los más desfavorecidos.
La Administración ha establecido los preceptivos servicios mínimos que han sido fijados en 2 personas en turno de mañana y 3 en turno de tarde.
al objeto de intentar la mediación que posibilite evitar el conflicto laboral, provocado por el afán explotador de CLECE-SAS.
Una vez más, el último eslabón de la cadena es el elegido por la Administración y las empresas interpuestas, en este caso CLECE, para cebarse contra las condiciones laborales y económicas de los más desfavorecidos.
La Administración ha establecido los preceptivos servicios mínimos que han sido fijados en 2 personas en turno de mañana y 3 en turno de tarde.
al objeto de intentar la mediación que posibilite evitar el conflicto laboral, provocado por el afán explotador de CLECE-SAS.
Desde CGT, agotadas las vías de negociación previas al inicio de la huelga, vamos a poner toda la carne en el asador hasta que se reparen los daños colaterales a l@s limpiador@s de Barbarela. Se da la circunstancia que CLECE no va a ver modificado su contrato y que sus responsables han manifestado, a titulo de chiste, que el ahorro en sueldos del personal de limpieza se va a dedicar a proporcionar al SAS papel para cubrir las camillas hospitalarias.
CGT-Málaga