El ERE y la MSCC de la empresa de telemarketing Unitono en los centros de Ourense y Madrid.
No nos cabe duda de que los despidos colectivos y las modificaciones sustanciales de carácter colectivo son herramientas de las empresas para atacar los derechos de la clase trabajadora, herramientas que actualmente se han quedado absolutamente desequilibradas en favor de las empresas. Pero siendo esto así, lo que acaba de presentar a las organizaciones sindicales y al Ministerio de Trabajo la multinacional Grupo GSS-Covisian es un fraude con todas las de la ley.
El viernes 6 de marzo de 2020 el Grupo GSS-Covisian formalizó su intención de realizar un proceso simultaneo de Despido Colectivo y de Modificaciones Sustanciales de las condiciones de trabajo en la sociedad de telemarketing «Unitono Servicios Externalizados», empresa que controla al 100% desde el año 2019, cuando de manera simultánea, en su empresa matriz, «Global Sales Solutions Line» que se dedica a exactamente lo mismo (Contact Center), bate récords de contrataciones mes a mes.
Entrando en el primer análisis de lo que nos han presentado hemos de señalar que las paradojas que se dan en este expediente son de calado. Empezar que el 6 de marzo, mismo día que en un hotel de Madrid uno de los dos directores generales de GSS en España, Antonio Fernández Borondo, se reunía con los sindicatos para decir que la situación estaba muy jodida, y que la única solución son los despidos y las reducciones de jornada, el otro director general, César López Pérez, visitaba Badajoz, junto con el alcalde del PP, Francisco Javier Fragoso, para anunciar la inminente creación de 500 puestos de trabajo en la capital pacense. (https://www.hoy.es/badajoz/incorporara-empleados-badajoz-20200307003757-ntvo.html).
El descaro de esta multinacional no tiene límites. Pretende despedir a teleoperadores que atienden en portugués para Naturgy desde el centro de Ourense cuando reconoce que busca gente para ese perfil e intenta reducir la jornada de personas de jornada completa a jornada parcial cuando es algo explícitamente prohibido por el vigente estatuto de los trabajadores en su artículo 12.4.e.
GSS/Covisian busca el respaldo sindical para realizar 72 despidos mediante este ERE (45 en Ourense y 25 en Madrid) y 61 reducciones de jornada a 25 horas (39 en Ourense y 22 en Madrid), mientras tiene a más de 1200 personas contratadas a través de ETT en Madrid para los mismos puestos que pretende destruir.
CGT lo tiene claro. Tonterías las justas. Este proceso es un montaje que rechazamos y para lo único que nos van a servir estos 30 días es para desenmascarar a estos impresentables y para hacer públicas las perversas intenciones de esta multinacional italiana controlada recordemos, por el fondo de inversión Aksìa Capital IV.
Aconsejamos desde CGT a estos señoros que el primer ejecutivo de Covisian en el estado español le cuente al primer ejecutivo de Covisian a nivel global su experiencia en el pasado., porque, si bien es cierto que tanto GSS como Unitono han cambiado de accionistas en los últimos años, la realidad es que no han cambiado en nada, siguen siendo los mismos perros con distinto collar. Desde aquí recordamos lo que le dijo a esta multinacional, que ya dirigía Cesar López, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid en 2012 cuando quiso realizar un ERE que CGT demandó y ganó:
«…El legislador quiere que el control judicial quede limitado a la valoración sobre la concurrencia de unos hechos: las causas porque, en suma, se trata de un despido objetivo, debiendo ser posible valorar las causas y los hechos de forma objetiva. Lo que es objetivo es objetivo y es sencillo de demostrar y no precisa subjetivismo judicial pero tampoco empresarial. Pues bien, estos hechos los hemos valorado y las causas legales y objetivas no existen. Lo que sí existen son otros hechos: amortización de puestos de trabajo y simultánea / creación de nuevos puestos con masiva contratación de trabajadores ajenos, temporales, y una empresa que afirma estar en crecimiento en la forma que hemos desarrollado en los fundamentos que preceden. Cuando una empresa amortiza puestos de trabajo y crea otros en la forma y circunstancias en que la demandada lo ha hecho en el supuesto examinado se trata de una decisión empresarial interesada y subjetiva que no se ajusta al ineludible requisito de objetividad por imperativos de la producción o de la gestión de la empresa que proclama el art. 51 y que al ser subjetiva impide la aplicación del precepto y determina que los despidos lo sean sin justa causa…»
También recordamos otra parte de esta sentencia, que 8 años después, esta gente se ha olvidado, dado que pretende exactamente lo mismo:
«…También es importante destacar que la inmensa mayoría de las nuevas contrataciones se realizan para la categoría de teleoperador (la más básica) que se incluye en el grupo de operaciones que junto con el de administración conforma el grupo D, a tenor del Convenio, dentro del cual se puede acudir a la movilidad en los términos del art. 22. Y si bien es cierto que este artículo nos dice que la movilidad funcional dentro del mismo grupo profesional no podrá realizarse entre especialidades radicalmente distintas, que requieran procesos formativos complejos de adaptación, no parece que las funciones de teleoperador, especialista o gestor requieran la utilización de tales procesos complejos cuando la empresa acude a nuevas contrataciones para este grupo cuya experiencia no verifica rigurosamente…»
Creemos que, sin duda, estos dos párrafos se repiten en este caso al milímetro. A partir de ahora se abre un plazo de negociación no superior a un mes en el que, según la ley, se debe trabajar para «evitar o reducir» los despidos y las reducciones de jornada que la empresa pretende ejecutar. Para CGT estos 30 días son el plazo que tenemos los y las trabajadores/as para obligar a Covisian a retirar este ataque salvaje a nuestros puestos de trabajo. Desde CGT no aceptamos ni asumimos las causas que hoy ha expuesto la dirección de la empresa.
Fuente: CGT - Telemarketing