Se ha ido Javi, nuestro Javi, ayer lo encontraron muerto en su casa compañeros del Sindicato, alarmados porque no sabíamos de él desde hacía unos días.

Javi, nuestro Javi, era un magnífico periodista, un espléndido escritor, pero ante todo era el mejor de los militantes, la mejor de las personas que hayamos podido conocer.

Injustamente tratado por el Ayuntamiento de Madrid y sus cómplices, que no cejaron hasta conseguir despedirlo y lograr que no fuese readmitido, nunca lanzó un improperio contra ellos, lo hacíamos los demás por él, pero sí levantaba su pluma contra todo opresor, contra todo poder y a favor de los aplastados, de los oprimidos. Todas las luchas eran su lucha.

Javi, nuestro Javi, era un magnífico periodista, un espléndido escritor, pero ante todo era el mejor de los militantes, la mejor de las personas que hayamos podido conocer.

Injustamente tratado por el Ayuntamiento de Madrid y sus cómplices, que no cejaron hasta conseguir despedirlo y lograr que no fuese readmitido, nunca lanzó un improperio contra ellos, lo hacíamos los demás por él, pero sí levantaba su pluma contra todo opresor, contra todo poder y a favor de los aplastados, de los oprimidos. Todas las luchas eran su lucha.

Hoy es el momento del dolor, de la pena, incluso de la rabia, pero mañana debemos agarrarnos a esa rabia y continuar luchando hasta conseguir que este mundo cambie, se lo debemos a Javi, que hasta el último día ha peleado por ver la A de la Anarquía en el horizonte.

Salud, compañero, que la tierra te sea leve.


Fuente: SP del STAP

Se ha ido Javi G. de la Paz